Comprometidos con buscar que el sistema educativo logre que las escuelas sean espacios que acojan a todos los estudiantes con mayor énfasis en aquellos que se encuentran en una situación de vulnerabilidad, la Sociedad Peruana de Síndrome Down (SPSD) llevo a cabo el proyecto piloto “Valorando la Diversidad en la Escuela” el cual promueve la participación de todos los estudiantes en las actividades escolares, compartan con sus compañeros y progresen en sus competencias, alcanzando diversos aprendizajes.
El proyecto se realizó durante el año 2019 con el objetivo de fortalecer las capacidades de la comunidad educativa en relación a sus políticas, prácticas y cultura inclusiva en dos instituciones educativas localizadas en San Juan de Lurigancho y El Agustino, distritos de la Ciudad de Lima. Involucró a diferentes actores; entre ellos, 84 docentes, 122 estudiantes, 60 familiares, 7 directivos y 1 docente de la Dirección de Apoyo y Asesoramiento a las necesidades educativas especiales (SAANEE).
La planificación y ejecución del proyecto contó con una evaluación y diagnóstico institucional que permitió diseñar estrategias y ejecutar la intervención. Por último, se realizó la devolución de los resultados de la implementación, lo cual conllevo a la reflexión acerca de los compromisos y responsabilidades para promover una educación inclusiva y de calidad.
El proyecto piloto “Valorando la Diversidad en la Escuela” ha permitido aproximarse a la realidad de las escuelas públicas desde la experiencia de cada uno de los actores de la comunidad educativa, logrando resultados favorables. A continuación, se detallan los principales:
- Valorar la diversidad en la escuela. Los actores educativos se visualizan como personas que requieren apoyos en su vida y comprenden que la inclusión significa responder a las diferencias de la sociedad.
- Liderazgo en la Inclusión. La escuela asume el compromiso de plantear rutas de trabajo para la inclusión; por ejemplo, el crear un comité de atención a la diversidad y construir nuevas alianzas.
- Los docentes reflexionan sobre su rol. Han transformado sus concepciones sobre educación inclusiva; asumen con responsabilidad y compromiso la presencia, participación y progreso todos sus estudiantes.
- Los estudiantes como parte de la diversidad. Reflexionan acerca de mejores formas de trabajar colaborativamente entre compañeros y afirman su rol para promover la convivencia en la escuela.
- Las familias aprenden en la escuela. Reconocen la importancia de encontrar mejores formas de apoyar a sus hijos/as en su desarrollo y valoran que puedan aprender en la escuela junto con otras familias y los docentes.
- La comunidad educativa se une a favor de la inclusión. La inclusión es valorada como una característica inherente a su institución y se comprometen a garantizar una educación de calidad para todos sus estudiantes.
El siguiente paso es replicar el proyecto en diversas escuelas públicas a lo largo del país y de esta manera seguir colaborando en la construcción de centros educativos inclusivos de la mano del personal docente, familias, alumnos e instituciones responsables de la educación en nuestro país.