La educación inclusiva es aquella que valora y acoge la diversidad de todos los estudiantes; para lograrla es importante entender que es un proceso que implica la transformación del sistema educativo y es necesario identificar la situación de las escuelas en cuanto a sus prácticas, políticas y culturas escolares.
Durante los últimos años se ha invertido tiempo y esfuerzo para lograr que la educación siga ese camino con el fin de lograr una educación de calidad que no deje a nadie atrás, tal como se señala en el objetivo 4 de desarrollo sostenible (ODS).
Y tal como se señala en el informe de Seguimiento de Educación en el Mundo 2020, la educación es mejor cuando acoge a la diversidad; por lo tanto, los alumnos no deben adaptarse a las escuelas, son las escuelas las que deben adecuarse para atender a todos los niños, niñas y adolescentes.
Sin embargo, antes de la pandemia alrededor de solo 73% de las escuelas indican que reciben apoyo de los equipos del Servicio Asesoramiento y Atención a las Necesidades Educativas Especiales (SAANEE) , un 23% de docentes de centros escolares públicos y privados manifestaba estar capacitado en la educación inclusiva y el 2% de centros escolares asignaba docentes sin aula a cargo en 8 de 25 regiones del país para atender las Necesidades Educativas Especiales asociadas a discapacidad (Defensoría del Pueblo, 2019; ENDO, 2016).
En estas condiciones nos encontró el brote del Covid-19, lo cual ha significado que cerca de 8 millones de estudiantes peruanos desde el preescolar hasta el nivel secundario se queden en casa. De los cuales, 67 227 estudiantes matriculados cuentan con algún tipo de necesidad educativa especial (NEE) ya sea asociada o no a la discapacidad (Censo Escolar, 2019) se queden sin el apoyo y materiales educativo adaptados para sus necesidades desde las escuelas.
En respuesta a la paralización de la educación presencial se implementó la estrategia “Aprendo en casa”; sin embargo, todavía es un desafío lograr la accesibilidad, contar con recursos y las adaptaciones necesarias para todos los estudiantes. Si bien el medio más común es la televisión (78%) y la radio (20%), solo una parte de los estudiantes puede acceder al internet (22%) y complementar su aprendizaje con clases virtuales.
En esta situación, las familias son las que piden más apoyo para mejorar el aprendizaje en casa incluyendo orientación, recursos y materiales complementarios ya que la brecha digital ha limitado a que los estudiantes accedan a contenidos educativos. Por lo que es importante fortalecer el soporte y acompañamiento para las familias de manera que puedan potenciar el aprendizaje de sus hijos e hijas desde sus hogares.
La situación a nivel nacional nos ha enseñado que un formato no se ajusta a todos y se deben implementar nuevas estrategias para que más estudiantes sigan sus aprendizajes desde sus hogares. La educación inclusiva el camino para transformar las escuelas y concebir una educación para todos y todas porque creer en la educación es creer en la inclusión.